YAKO llegó a nosotros tras un aviso de la policía. Se encontraba vagando por las calles del pueblo, pero ahora está a salvo esperando una oportunidad para encontrar su hogar definitivo. Aunque desconocemos su historia, lo que sí sabemos es que tiene un corazón lleno de amor y cariño para dar. 

A pesar de su mirada desconcertada desde su chenil, Yako no entiende bien lo que ha ocurrido, solo sabe que necesita un hogar lleno de cariño. Aunque su raza requiere una licencia PPP, no dejemos que eso lo convierta en un perro invisible, porque es muy bueno y tiene mucho amor para dar.

Si estás dispuesto a brindarle una oportunidad, Yako te estará esperando con los brazos abiertos.